Primi

el mejor pulpo de bogota sin duda, unas alcachofas peculiares y unos ravioles de queso riquisimos. Pueden ir con seguridad comeran muy bien, lo malo es la obra frente al restaurante y uno queda con los zapatos encharcados

Amo este lugar. Un ambiente sencillo, sereno y muy familiar,agradable. La Atención fue discreta y la comida maravillosa, delicada, con sabores mediterraneos y un lujo de repostería. Voy cada vez que puedo.

Desde el primer momento la atención es excelente, todo el personal está pendiente de lo que uno necesite, además se siente un ambiente muy acogedor y agradable como para ir en familia o en pareja. En cuanto la comida, deliciosa, sobretodo la pizzeta como entrada. Además si desea un buen cóctel está bastante recomendados los de autoria del lugar.

La decoración interior es hermosa. Con sus botellas de vino , de aceite, de acetato balsámico, sus pastas... expuestas,abre el apetito y la sed de cualquiera nada más entrar. La terraza por contra, es algo más sobria aunque muy linda! Hay calefactores para asegurarse de que nadie pase frío allá. En cuanto a la comida, la burrada con tomates orgánicos y el carpaccio Primi estuvieron deliciosos. Especial mención a los tomates. La pizza de pancarta e higos fue sin duda el toque diferente de la noche. Espec! De postre, un volcán de dulce de leche. Para los que amen el dulce, les encantará. Viene acompañado de helado de vainilla y migas crocantes de galleta. Increíble! El servicio fue muy atento en todo momento y estuvieron siempre pendientes de que no estuviésemos pasando frío. Lugar ideal para ir en grupo con amigos o con pareja.

Pedimos pizza y sopitas de tomate. Todo estuvo rico, aunque las pizzas podrían tener mas sabor. El Ambiente me gusto, solo que nos sentaron en una mesa en un rincon de la terraza donde no había mucha atencion por parte de los meseros