Muy buena opcion para disfrutar: costillas, carnes y un buen vino. Las cebollas de entrada sorprenden por su tamano y buen sabor. El servicio no es homogeneo, algunos la sacan del estadio, otros apenas cumplen. Las instalaciones muy bonitas, con vista al parque de Usaquen. Muy recomendado

Muy buena opcion. Deliciosa la carne y las costillas de cerdo. Las instalaciones son sencillas y el servicio podria mejorar. La calidad de la carne supera a muchos de los tradicionales restaurantes de carnes de Bogota. Recomendado 100%

Las instalaciones son las mismas, pero deben haber cambiado la administracion y el personal de cocina, pues la comida deja mucho que desear. Ya no hay musica en vivo, el servicio muy lento.

Casi no reconozco la comida de este restaurante!!! Si bien la pandemia afecto, la calidad de la comida no guarda relacion alguna con el resturante al que estabamos acostumbrados. Los chicharrones parecian suela de zapato y en general los platos todos, tipo "corrientazo". Muy triste

La comida es buena, pero para el precio y las evaluaciones debería estar mejor. El servicio excelente, conocen bien la carta, son gentiles y ágiles. Las instalaciones son sencillas, cercanas a cafetería, con una una terraza agradable.

Una amplia carta, con muchas e interesantes opciones, en general deliciosas. El personal joven, bien capacitado. Las instalaciones en general son adecuadas, pero debido a la acogida, atienden en las barras y unas mini-mesas, que además de incomodas, no permiten poner dos los platos. Léase: un sufrimiento tratar de disfrutar la comida en estas condiciones.

El sitio es bonito. Los platos se demoran y esto se advierte en el menú, lo que no advierten es que el personal de servicio usualmente esta distraído, un almuerzo "rápido" toma un par de horas. La comida buena, los rolls un poco grandes, generosos de proteína, lo que les quita sabor.

La comida muy bien preparada, las instalaciones preciosas y lo mas sorprendente es el buen conocimiento que tienen los meseros de las caracteristicas de los cortes y vinos que ofrecen.

Encantador restaurante, con amplias instalaciones y personal atento, conocedor de la carta. La comida, mixta, algunas cosas deliciosas, por otras por debajo de nuestras expectativas. Nos sorprendio el Cocktail de Ron, expectacular.

Un tradicional en Bogota, que estaba pendiente de conocer. Muestra lo atrazado que estamos en oferta de comida. Por un precio similar en USA o Brazil, obtienes 200% mejor calidad. Ofrece 18 "cortes" todos pasados de termino, y en porciones poco generosas. Para quien no conoce un rodizio real puede ser interesante, pero para los demas, es decepcionante.