Los espacios, ambientación, shows de danza arabe son increíbles realmente entras y te transporta a otro lugar es encantador. Su ambiente te entretiene y se presta para pasar un buen rato dialogando tranquilo, su comida es buena el servicio un poco demorado ya que casi siempre está lleno el lugar.

Uno de los mejores restaurantes de Bogotá, cuenta con una carta variada de gastronomía colombiana, el lugar es muy acogedor, tranquilo y el servicio es bueno.

He visitado este restaurantes varias veces en diferentes años es un lugar tranquilo siempre está igual, me han atendido bien su comida es buena, el mirador me encanta aún que en la noche hace mucho frío es mejor ir bien abrigado.

El emplatado es hermoso tienen una cocina muy creativa, es un lugar informa cuentan con poco espacio para la cantidad de gente que los visita sin embargo es un lugar agradable las maids son amables y el servicio desde la cocina es demasiado demorado.

Las porciones son generosas, los nombres de los platos muy acorde a la ambientación y temática del lugar, venden camisetas de superhéroes, tienen una persona que visita cada mesa para dibujar a los niños que deseen, es un lugar agradable, buen servicio.

La ambientación es hermosa los sonidos que emiten los animales es bastante llamativo, además tienen talleres y juegos es un restaurante perfecto para niños la comida es buena el servicio muy demorado.

Como el nombre del lugar lo indica su especialidad las alitas de pollo, me encanta el acompañamiento de zanahoria y apio con salsa ranch el lugar es bastante acogedor en el segundo piso tienen un pequeño espacio de juegos (futbolito, rana, mesa de hockey) pase un rato muy agradable, el servicio por parte de la mesera "Paola" excelente.

Me encanto la presentación de las malteadas son bastante llamativas, gran variedad de brownies todo lo que venden es delicioso.

El concepto es genial, hay gran variedad de platos y te puedes servir todo lo que desees por tiempo de 1 hora, no puedes dejar nada de comida en el plato por qué te lo cobran, la bebida te la cobran aparte también y el sushi me pareció pésimo...

Sin duda alguna uno de los mejores restaurantes de Bogotá me encanto la comida y presentación de ella, ambiente sobrio y elegante excelente servicio, siempre muy atentos. Volveré!