La primera vez que fui, aproximadamente en marzo 2.022, me pareció que el servicio y el cuidado en servir los platos caliete y de buen sabor, era mejor que la última vez que estuve en octubre 2.022. Pedimos un tinto de verano que no estaba rico, el lomito de res me lo sirvieron más frío que tibio y los meseros, algunos muy amables pero otros indiferentes y sin mucha formación. El ambiente me pareció mejor en la noche que en el día. Es un bonito lugar pero deben tener más cuidado pues me pareció que han bajado la calidad.

Me gusta el sitio donde se encuentra, la casa, los platillos, la pastelería. Es un lugar agradable para desayunar y tomar las onces.

Durante toda la pandemia no había vuelto al restaurante El Patio, en el cual se comía una carne muy rica y muy bien acompañada pero al regresar la noche del 5 de agosto, nos llevamos una gran decepción puesto que los medallones de lomo de restaurante, los sirvieron cada uno en un término de cocción diferente, secos, ya no eran medallones sino tajadas delgadas; a las salsas se les había subido el sabor un poco ácido y la ensalada muy pobre. Hicimos este mismo comentario a la persona que nos atendió y nos respondió que le transmitiría inmediatamente al cocinero pero no nos respondieron nada. Pueden mejorar los protocolos de bioseguridad, el baño es muy rústico y expuesto, la decoración es cálida y bonita. Espero que mi comentario sirva para que mejoren puesto que era muy de nuestro agrado ir a este sitio.

Rico, una buena propuesta, descomplicado, ambiente muy agradable, la atención buena, precios abordables. Me encanta para desayunar y tomar onces.

Me encanta Amarti. El restaurante es muy bonito, buena atención y queda en un lugar que tiene muy buen ambiente.

La comida es bien preparada y bien presentada, la atención excelente. Además me gusta su ubicación y sus diferentes ambientes.

Este restaurante es una muy buena razón para ir al centro de Bogotá. Tiene muy buen ambiente bohemio y una decoración original y muy bien lograda. Me gusta mucho!

Sencillamente me encanta! Los platos son muy pequeños y costosos pero son ricos. Se encuentra en un lugar muy lindo y tiene un ambiente seductor.

Me encanta Usaquén y este restaurante queda en una hermosa y muy bien decorada casa típica sobre la plaza. La comida es rica y el servicio es bueno.

La casa, la decoración y sus diferentes ambientes, son una belleza! La comida es rica y lo que más me gusta es el brunch de los fines de semana. Costoso pero vale la pena.