Amarti

La comida no tiene una personalidad extraordinaria que le permita ser memorable. Tuvimos una muy mala experiencia con una cazuela de mariscos que en realidad terminó siendo algo parecido a una sopa de tomate. Sin embargo, la administración consideró nuestra insatisfacción y no cobró la cazuela. La selección de audiovisuales es muy distinguida y entretenida. El patio del lugar resulta siendo un sitio bastante frío. Pareció haber sido un error no haber pedido pizza y haberse aventurado en las pastas o lasagnas.

Todos los platos que he probados son deliciosos, mi favorito el risotto de mariscos y los raviolis negros con camarones. El servicio es bueno mas no excelente. Seria lo único que le mejoraria.

Fuimos a desayunar el domingo temprano. Tengo que decir que es muy normalito. La barra que ponen es bastante limitado. No hay mucha variedad en los panes, ni en las frutas, de pronto en los quesos, pero en verdad tampoco. Los meseros son amables pero la cocina se puede demorar en preparar unos huevos. La relación precio/valor deja mucho que desear. Por eso precio hay mejores lugares para desayunar.

La carta tiene gran variedad de platos. Las pastas son buenas. Sin embargo, el servicio no es el mejor. Además, cada vez quitan más cosas. Antes servían como cortesía unos quesos con aceite de oliva junto al pan inflado. Hoy los quesos los cobran. Antes cuando uno pedía un café, le ofrecían galletas como cortesía. Ya no. Cada vez se vuelven más tacaños en esos pequeños detalles que caracterizaban el lugar.

Comida típica Italiana con muchas recetas que no encuentras en otros restaurantes italianos de la ciudad, sin embargo creo que podría ser mucho mejor. Recomiendo el Parpadelle al Telefono y la milanesa. El ambiente es cómodo aun cuando hay que tener cuidado en la terraza si es un día muy soleado.