Namaste falla en los detalles. La comida buena: cerdo con frutos secos y lentejas rosadas recomendados, sin ser espectaculares. Pero: si uno quiere naan para empezar, lo cobran; el arroz que acompaña los platos es blanco normal, si uno quiere basmati (el indicado) lo cobran también adicional; se equivocaron en los niveles de picante que ordenamos para los platos (a uno se los preguntan) y uno de los platos quedó incomible; el mango lassi deja mucho que desear. Buen intento, pero lo pensaré mucho antes de volver!

Primera visita que resultó toda una sorpresa en la Candelaria! La restauración de la casa es espectacular y el sitio tiene muy buen ambiente. La comida muy buen sabor y carta con buena variedad de platos que ofrecen propuestas novedosas en la combinación de sabores. Para no perderse el cheescake de lychees de postre. Para volver una y otra vez!

La especialidad son las quesadillas, que se pueden pedir en combo, con acompañamiento y bebida, a muy buen precio! Tortillas y queso en su punto y los ingredientes adicionales de la mejor calidad. Buenas combinaciones, todas deliciosas!

Muy buena propuesta, excelentes ingredientes y combinaciones novedosas. Paula Silva hace honor a su trayectoria en un sitio acogedor. Muy recomendado para quienes aprecien nuevos horizontes culinarios!

Sitio ideal para ir con amigos a pasar un muy buen rato. Cocteles diferentes y muy bien logrados; gordo fries con alioli espectaculares; las hamburguesas son como para no perdérselas: en su punto y bien balanceadas en sabores! El resto de platos bien logrados y la decoración y la música permiten sentirse muy a gusto. Buenos postres y servicio amable. En conjunto, el resultado invita a volver.

Menu diferente a la hora del almuerzo, que deja por fuera los mejores platos de la carta. Tanto que las opciones se limitan a una comida italiana muy normalita. Excelente la panna cota como postre, pero eso no mejora el sinsabor del resto del almuerzo. Máxime, cuando se ha visto a la entrada la tentadora carta de la noche.

El sitio es muy agradable, aunque son mesas de máximo 4 personas. Aparte de las pizzas, que son excelentes en sus diferentes sabores, se recomiendan los espárragos, el dip de alcachofas y los duraznos con romero: cada uno de estos sale en un punto perfecto! Regular el servicio, pués depende del genio que esté la mesera de turno.

Después de muchos años de ir, aseguro que este es uno de los secretos mejor guardados de Bogotá! La base es partir de ingredientes del pais (en especial del Amazonas y el Chocó) y lograr unas preparaciones fuera de serie. El concepto tanto del sitio, como de los platos, es bastante particular, donde logran lo mejor de cada uno de los ingredientes dentro de un ambiente muy amable. Todos los platos son únicos, pero las entradas imperdibles son los "Palmira Rolls" y los "Arrullos". Para quien se arriesga a experimentar nuevos sabores con la mejor preparación, este es el sitio!

Para quien le guste la buena comida, esta es una excelente alternativa. Mas allá de lo mejicano, manejan ingredientes frescos de muy buena calidad en preparaciones diferentes y deliciosas. Platos para compartir de acuerdo con lo disponible, en porciones suficientes para probar varios. El guacamole es inigualable, pero en general todos los platos son sorprendentes. El sitio es acorde con el sector y aunque se enredan explicando el concepto, el servicio es amable. Recomendado para ir con tiempo, apetito, billetera y ganas de disfrutar nuevos platos.

Delicioso, asi es como se siente uno y asi es como resulta la comida. Pastas frescas con gran variedad de salsas, ambiente tranquilo y amable. Recomendado el plato de lomo con pasta y/o ensalada. Un italiano muy bien logrado, sin formalismos, ni pretensiones, para volver una y otra vez.