Es un sitio muy agradable, buena música y en general todo estuvo bien. Dos detalles, eran las 4, y algo que pedimos no lo podían preparar porque no les había llegado. Y otra cosa fue que pedimos la tortilla española con chorizo y nos la llevaron sin chorizo, que porque la estaban sacando con queso manchego, cosa que en ningún momento nos avisaron, ni tampoco tienen la precaución de corregir en la carta.

Un sitio agradable, la comida exquisita, son generosos con las porciones de acompañantes. El personal de servicio, muy amable y atento. Es muy concurrido por lo tanto algunas veces hay que hacer fila.

Hay variedad de platos de pastas, diferentes a los que un encuentra en restaurantes similares. Es delicioso. También hay opciones para ir a tomar el algo.

La comida es rica y abundante, tener en cuenta la media porción. Aunque es un poco demorado para servir. Si vas en carro, en la cuenta te incluyen el valor del parquímetro.

Ambiente irlandés moderno, para los que les gusta el rockcito suave y presencia de gente extranjera. También pantallas para ver juegos deportivos.

La sazón es muy rica. Porciones suficientes, hay variedad en el menú y en los precios. En todas las sucursales se conservan estas características.

Una manera diferente de comer algo delicioso, pero me parece pequeña la porción. Es como un bocadito, pero muy rico. Algo chévere

Deliciosos los montaditos. Hay gran variedad para elegir diversos sabores. El ambiente es muy agradable, buena música. Ricas las sangrías.

La especialidad de sus platos tipicos la saben muy bien. Y la atención es muy buena. Lo malo es que la mayoría de las veces hay que hacer fila, aunque le hacen menos tediosa porque reparten agüita y tienen sillas. Por estar tan lleno regularmente, hay mucho ruido para poder conversar. De todas maneras es un sitio 'obligado'

Por su decoración es muy llamativo y agradable, pero es muy ruidoso para conversar tranquilamente. Algunas veces hay que hacer fila para entrar. La comida es buena pero cara. (Laureles)