Smoking Molly

El lugar es muy agradable tiene muy buen ambiente. El servicio es bastante demorado. Pero las hamburguesas son deliciosas el pan es increible, la vegetariana muy recomendada y las porciones adecuadas. Las papas un ppco grasosas.

Muy normal la comida, las hamburguesas son buenas y las papas también pero nada que resaltar, solo la demora en despachar los pedidos. La carne esta muy bien sazonada y los ingredientes que usan son buenos pero no es nada memorable, vale la pena ir como por conocer el sitio y de pronto disfrutar de alguna banda que este tocando pero la comida no es el principal motivo para ir.

Fuí con altas expectativas pero fue una total decepción, no creo que sus hamburguesas sean buenas, no destacan por nada en particular, totalmente olvidables. Lo que si destaca, son sus papas, pero por estar totalmente quemadas, estuve todo el resto del día intentando quitarme el sabor de esas papas quemadas. Puede que sea un buen sitio para escuchar rock en vivo pero su comida es muy regular o más bien mala. Otro gran problema es el servicio, las meseras no están preparadas ni interesadas en brindar un buen servicio, la atención es malisima.

Que hamburguesas tan Ricas! Pedimos la de la casa: Smoky molly burger y la Que era Honey algo .. me encantaron! Las papitas sin fresquitas y no de esas congeladas, tienen una mayonesa deliciosa. Me encanto! Y eso que no soy muy de fast foods.. el Sitio Es muy agradable para ir de noche, hay música en vivo y eso le suma muchos puntos, los meseros son queridos pero un poco dispersos. Sin dudarlo regresare!

Fui con dos personas mas a un concierto y a comer algo: pedimos Veggie Molly, que son vegetarianas, hechas con croqueta de garbanzo, mermelada de manzana, gouda y cebolla caramelizada. También pedimos Spicy Honey que tiene una reducción de aji en miel y jack daniels con queso gouda. Sabrosas, con papitas a la francesa (papas reales). Cerveza, limonada y gaseosa. El servicio deja algo que desear: para ser una noche de concierto con el sitio full solo había dos meseros quienes por supuesto estaban ya copados de trabajo y estresados.