San Pedro

Lo recomiendo por la agradable y poco disponible experiencia de comer en un espacio abierto y tranquilo encartagena, la comida viene de mas a menos y el servicio mejor sentarse y disfrutar de la plaza

Es muy lindo y agradable el lugar, justo en frente de la iglesia de San Pedro Claver. La comida es buena y bien preparada. Es el lugar perfecto para cenar afuera en una noche fresca. Muy visitado por Cartageneros y Turistas. A veces el servicio es un poco flojo casi hasta el punto de sentirse que no les importa hacerlo pasar un momento memorable. Bueno para conocer no necesariamente para volver.

Realmente el restaurante son tres ambientes diferentes Un ambiente es el bar donde pueden degustar de diferentes cocteles y licores y saborearse con unas deliciosas entradas El segundo ambiente es el de el restaurante adentro con muy buen ambiente, agradable con buena temperatura y nivel de musita y ruido bastante bien manejado El tercer ambiente es el de las mesas afuera que es mas informal El servicio un tanto demorado, posiblemente con problemas en cocina ya que llovió y de un momento a otro decidieron habilitar las mesas de afuera, pero hubo muchas quejas de las diferentes mesas por la demora La comida excelente, tanto las entradas, el sushi y los platos fuertes.

Delicioso! Recomiendo en entradas las empanadas de camaron! Probe también un arroz Mandarin que estuvo delicioso. En vinos hay variedad! Volveré!

El restaurante se ve muy agradable antes de sentarse en su ambiente exterior, sin embargo, la comida y el servicio dejan mucho que desear. Sólo algunos comentarios para que lo piensen antes de sentarse: 1. Se pidio un sushi en salsa terminator y para sorpresa la salsa era de champiñones, algo que en mi vida habia visto y que, como entenderan, hace perder cualquier gusto por el plato; 2. Se pidio una coca cola normal y trajeron una light y cuando se le repuso al mesero trajo otra pero rebotada y cuando se abrio se boto sobre la mesa; 3. Los precios no se corresponden con la calidad de la comida, sobre todo en platos como los langostinos en salsa de maracuya.