Pastelería Francesa

Para el desayuno, el pan no estaba fresco, el chocolate sólo espuma y poco líquido, pedimos una torta de postre y estaba vieja Solía ser un buen lugar, pero el servicio está cada vez peor, parece que te estuvieran regalando la comida y si te quejas por el servicio te regañan, adicionalmente no te dan factura para ahorrarse el pago de impuestos. Nunca más volveré y no lo recomiendo. TODO MAL

La pastelería es variada y atractiva en apariencia pero desafortunadamente no siempre fresca, una atributo esencial en este tipo de productos.

Uno de los planes más ricos en una tarde fría en La Candelaria es irse a este sitio a comer bizcochitos con bebidas calientes.

Los precios son demasiado altos comparado con la calidad del producto además de que el servicio es bastante regular porque uno tiene que acercarse a caja a pedir las cosas y luego tienen el descaro de pedir propina

El servicio demasiado lento, luego que pedimos tomó 45m en que nos sirvieran; aunque estaba rico creo que tanto tiempo para que sirvan un café y un pan no tiene explicación