NO he ido pero leyendo los comentarios hay que conocerlo pronto,

Mis familiares no pueden venir al centro sin comerse su postre y llevar para la casa.

Cuando la reunión pasa de 15 es práctico pedir arroz chino que rinde y no es costoso y evita el complique de cocinar para tantos. Siempre pedimos para llevar a casa a todos les gusta.

Solo los antojos de mi madre nos hacen venir a este restaurante tan concurrido, popular y demorado, lo que pasa es que la comida si es muy rica.

Con los primos caleños hay que comer borrajados, sancocho, shampus y todas esas cosas ricas del Valle mirá vé jeje

El pescado frito estaba exquisito....como en la fábula de Mirringa, pero también el vuido y la cazuela no se quedan atrás, este es nuestro pescadero elegido.

A mis hermanas nadie las saca de su idea de que no hay, no ha habido ni habrá otro restaurante mejor que este y tienen razón. Siempre salimos satisfechos con la comida y la atención.

Con la comida criolla muchas veces es preferible, más cómodo y práctico comer en este restaurante que prepararla en casa; cada uno pide su plato todos quedamos a gusto y nadie se sacrifica cocinando para tantos.

Desayunar como reyes es lo que nos merecemos y lo que nos gusta a todos en familia, acá no cabe el adagio "como en casa" porque ni en la casa sirven 10 o más desayunos diferentes y deliciosos. Con ese desayuno para qué almuerzo.

Los primos caleños siempre quieren venir a bailar salsa como si no mantuvieran haciéndolo en Cali y tienen razón porque se pasa del carajo, es un espectáculo.