Para mi uno de los mejores restaurante de comida Italiana. Platos relativamente sencillos pero ingredientes con sabor. La carta de vino podría mejorarse...

Me encanta el lugar... Bien incrustado en el barrio que le corresponde. La comida es sencilla, tapas, pero con muy gusto. La música es agradable y el servicio muy bueno. Recomendado para ir de copas con amigos.

Es un sitio muy agradable y con comida variada. La carta de vinos es generosa. La acústica del lugar no es la mejor y tal vez seria el único bemol a este paseo culinario. Recomiendo las albóndigas de cordero o el steack frites.

Es de las mejores cartas de vino de la ciudad y de los pocos lugares donde puedes degustar variedad de vinos por copa. En cuanto a la comida, el concepto es original: tapas con sazón local. Con mucho sabor pero peca por no incluir suficientes verduras. Lo recomiendo sobre todo para los que gustan - como yo - del buen vino.

El ambiente es agradable. Me gusta mas el de la zona G, es mas intimista y menos "movido" que el de Usaquen. La carta de comida es variada y para todos los gustos. Su carta de vinos ofrece buenas opciones. Le falta algo para llegar al estándar del buen bistrot. La ensalada de sandia con queso feta: 1A. Les recomiendo para una cena entre amigos, que buscan buen ambiente sin tanto formalismo.

Lo que me encanta del sitio es que la calidad de los ingredientes. La comida es sencilla pero elaborada con ingredientes sinceros. Los tomates, la carne la lesca del dia, todos llevan el sello de la frescura. El ambiente es agradable y la carta de vinos bastante amplia para los degustadores. Muy recomendado. Eso si... Recomiendo siempre llegar antes del rush: 12 para almuerzo, 7 para cena.

Cocina artística con ingredientes muy naturales. El ambiente es muy tranquilo y zen. Altamente recomendado para los "bons vivants".