Es un lugar pequeño y siempre esta lleno, la ventaja es que te atienden y te entregan el pedido muy rápido mientras estuve almorzando varios clientes dejan su carro al frente y no se demoran mas de 10 minutos para llevarse su pedido. La sección de hamburguesas y la de sandwich están separadas (agiliza los pedidos). La salsa de la casa es espectacular. Y si quieres llevar a tu casa productos para preparar, tienes varias opciones.

Las instalaciones siempre son confortables, el servicio es muy bueno y la labor social que desarrolla es lo que mas me impulsa a seguir frecuentándolo. La carta completa es muy buena y siempre busco probar nuevos platos aunque la carta no varia mucho. Un plus es la barra de ensaladas variadísima, salsas deliciosas y que decir de las semillas una mezcla de sabores y texturas inigualable.

El lugar es un poco incomodo por tantas cosas al rededor, ese es su estilo, la rumba es muy buena y la música excelente. los precios son muy altos para todo desde la entrada al parqueadero, el cover, y mucho mas la comida, las bebidas y licores. El servicio, cuando esta lleno, es regular no hay coordinación entre cocina y mesas y puedes esperar mas de 40 minutos por una sola entrada. Se nota que ya no dan a vasto ya que nos sentaron en la cocina pero igual la ambientación permite esos espacios.

De las mejores hamburguesas servidas de Bogotá, Carne de muy buen sabor, buena porción, posibilidad de pedirlas a termino, acompañamientos básicos pero sabrosos, las instalaciones y la música generan un muy buen ambiente. Los shows en vivo son de muy buena calidad. Fallas en el servicio aun en horas no congestionadas y con pocas mesas ( San Rafael), meseros dispersos, tienes que pedir tus adiciones o bebidas varias veces a distintos meseros. Presencie la retirada de una familia por falta de atención.

Si deseas comer el mejor sushi de la ciudad no dudes en visitar este restaurante. Si deseas tener una celebración en familia, Wok te permite personalizar tu mesa, llevar tu torta, flores y están muy dispuestos a colaborarte en lo que necesites. Los jugos naturales son increíbles los recomiendo en lugar de consumir bebidas gaseosas. Si quieres sacar máximo provecho de tu visita, elije pescados y mariscos pues son de altísima calidad y frescura.

El campestre es muy bonito en instalaciones, zonas verdes, tiene capilla, animales y buen paisaje. El servicio deja mucho de que desear todo el tiempo te hacen mala cara, quieren que pidas a las carreras, los meseros siempre perdidos (no saben para que mesa es cada pedido), el único momento en el que te sonríen es cuando pides la cuenta y te preguntan si incluyes el servicio. La comida no es nada del otro mundo para lo costosa que es, que lastima porque de entrada todo se ve maravilloso.