Varietale

Es un lugar tremendamente acogedor, una casa a la que llegas y te acomodas en un rinconcito caliente a disfrutar de un café o de un té, cualquiera de los dos resultan deliciosos. Es amplio y tiene una combinación muy interesante entre lo moderno y lo antiguo. Si se busca un buen té es ideal, lo mejor es experimentar con las diferentes combinaciones que ofertan. La selección de panadería me parece adecuada, las tortas y las galletas me gustaron especialmente. Cuando está lleno es servicio es bastante despersonalizado, aunque eficiente. En cambio, cuando está más bien vacío es más agradable. Es cierto que se llena, sin embargo, no es ruidoso.

Era muy bueno en su inicio, pero ha desmejorado mucho la calidad, el servicio, hay mucha gente. El café llega frio a la mesa mientras están buscando cual mesa es.

El ambiente es muy amable, lleno de antigüedades como máquinas de coser en las mesas, plantas y fotos antiguas del lugar. Es un gran sitio para conocer los mecanismos de filtrado del café y el personal es muy amable, la pastelería deliciosa, especialmente el brownie, recomendadísimo el té.

Una experiencia única, las personas que atienden ofrecen una atención al cliente única!, puedés ver cómo preparan los filtrados de café mientras lo acompañan con una amena explicación, Delicioso café totalmente recomendado

Una cafetería con un ambiente excepcional y que emplea el barismo en todo su esplendor con diferentes tipos de técnicas que permiten uno disfrute el sabor del café acompañado de postres que aunque parecen simples tiene gran sabor combinando de una manera excelente. Es ideal para cualquier persona que quiera pasar un momento tranquilo y disfrutar de algo diferente.