Este lugar es un salón de onces, que además ofrece menú de restaurante. Hace varios años que no venía, y hoy reforcé mi opinión de aquella vez. Muy bonita presentación, todo de apariencia apetitosa en general (aunque hoy vi unos emparedados bite-size que parecían haber estado en vitrina hace dos días), precios bastante altos para lo que es, y un servicio que deja que desear (algunas de las señoritas se merecen un buen jalón de orejas). Pedí un simple café con un pastel. Bien el café, el pastel normal pero a medio calentar, y hubiera costado la mitad en una cafetería cualquiera. Hace tres años después de un almuerzo mediocre y costoso dije que no volvería por un buen rato, y hoy lo vuelvo a decir.

Regular. No es malo y la comida es fresca, pero le falta sabor y no es barato, y además es imperdonable que algunos componentes (las salsas en particular) estén frios y recien salidos de la nevera cuando los sirven. Un burrito con relleno frío es simplemente horroroso.

La compra de la cadena se está notando. Papas fritas diminutas, igual las hamburguesas, pero los precios iguales. Y el ambiente ahora es absolutamente genérico y perdió completamente su personalidad. Quizás no terminen de matar a esta gallina de los huevos de oro.

Muy rico este lugar. Comida deliciosa, espacio agradable con el jardín interior y servicio adecuado. El flan de caramelo es espectacular. Los tequeños con guacamole son muy ricos. Y el ají de gallina con papita criolla es delicioso. Lástima que quitaron el buffet dominical.

Este es un buffet de combate. Ese no es necesariamente un problema, pues ofrecen variedad sobre todo china, pero también tienen sushi, barra de ensaladas y comida internacional. El problema es que el precio ha seguido subiendo progresivamente debido a la mucha clientela (toca hacer cola para entrar), no se han molestado ni en poner un baño decente (y si son así con el baño, como serán con la cocina), el servicio no es amable (los dueños, que fueron amables al comienzo, ahora ya no les importa), me parece que usan mucho resaltador de sabor MSG, y lo más grave, ahora le pusieron límite de tiempo! Un buffet con límite de tiempo, EN FIN DE SEMANA, y especialmente con las colas largas que se arman para servirse la comida? Absurdo.

Pizza más que razonable y de lejos superior a las pizzas de marca, pero para domicilios únicamente (los lócales son muy sencillos). Cuando se pide una pizza con jamón, se ve el jamón, a diferencias de ciertas pizzas comerciales, dónde toca poner lupa. Unicamente pizza delgada, pero buena. Precios razonables. También tienen otras cosas, como lasañas, canelonis y fetuccinis, pero no las he probado

De las mejoras cadenas de comidas rápidas en Bogotá. Hamburguesas y ensaladas ricas, papitas sabrosas con la salsita Randy's, pero lo steaks son lo mejor. Las últimas dos veces me tocaron cajeros medio descoordinados, pero el servicio es adecuado.

Comida china decente a precio razonable, como para almorzar entre semana. No entiendo por qué degusta dice que el precio es de 70,000, cuando un almuerzo para una persona cuesta con bebida entre 20000-25000 máximo.

Solo para que se den cuenta de como tratan estos individuos a sus empleados, hagan google de "La controvertida puerta del restaurante Rausch", un artículo en El Espectador que muestra como les toca literalmente arrastrarse para entrar por una puerta de empleados que es apropiada si acaso para perros. Y pensar que yo he comido allá (Centro Andino).