Excelente, nos encantò. La comida es buena y los jugos naturales espectaculares ¡mamma mia! Empezamos con una entrada de empanadas de leche cortada rellenas de carne, muy deliciosaaaas- Y luego pedimos la carta una ensalada cesar para mi y una de atùn para Cesare. Me gustó mucho la cama donde viene la ensalada que parece una flor abierta y se puede comer. Cesare pidio agua mineral y yo un jugo de corozo, pero como9 son bien grandotes se pueden tomar entre dos. Que delicioso.. y los dulces árabes demasiados ricos .. los mamul de guayaba y unos conitos con pistacho son excelentes.. pero excelentes.. eso si el quiere gusto paga gusto.. porque baratos no son. Pero si que valen la pena. Te atienden bien y rápido.

Otra opciòn para deayunar, era llegar este sitio a tomarnos un milo con un pandebono caliente, siempre era una buena elecciòn. Por lo menos los pastelitos rellenos de pollo, les hace falta màs relleno. Son ricos pero traen poquito relleno. Otro de los que probamos fueron los de queso y los hawaianos. Tambien nos gustaron bastante. Pero definitivamente los pandebonos son lo mejor. Los jugos en leche tambien aguantan como decimos por acà en la costa. Es una de las pocas opciones en Bocagrande donde se merienda o se come rico a un precio econòmico.

La ùltima vez que fui a Brasa y Barril fuì con mis padres y mi novio. Habìa llegado de Italia y queria claramente degustar de un buen asado y unas amigas de aquì de Cartagena, me recomendaron este sitio. Mis padres pidieron unas carnes, yo pedi churrasco y mi novio extranjero pidio punta gorda en 3/4, yo como buena cartagenera bien asada. La presentaciòn del plato excelente y a simple vista apetitosa. Lo que me preocupaba era que la carne no nos saliera dura, y que mi novio extranjero saliera contento. Y asì fue la carne jugosa, con buen punto de sal y bien asadita. Bastante tierno el churrasco. Ahh y pèdimos unas limonadas bien frias. Por supuesto, de entrada no pòdia perdonar una picadita de chorizito con bollo que tenìa mis tiempos que no probaba. Los chorizos son de la casa y me parecieron muy buenos. Yo recomiendo este restaurante.

Este sitio le encanto a Cesare, mi novio italiano, que por primera vez pisaba Colombia y quien tambien estaba muy convencido que aquì no encontrarìa nada bueno. Pero me encantò sorprenderlo con la cantidad de sitios con aire europeo que existen en mi Cartagena. Como nos quedamos en un apartamento en Bocagrande, saliamos a desayunar casi siempre a las diez de la mañana y por lo general llegàbamos a la Brioche. Él pedía un croissant o cornetino como le decìa relleno de chocolate y un cafè expreso cargado. Yo me iba por un sandwich y un capuccino y la verdad nos sabìa a gloria. Recomiendo el pan frances, una noche nos lo llevamos para hacer unas pastas a la matricciana en el apartamento y resultó excelente.

Estas arepitas le encantaron a Cesare, estaba muy feliz por la sazòn y el gustico al Carbòn que tienen. Esa noche ibamos a tomarnos unos còcteles y pasarla bien en Cafè del Mar, pero de un momento a otro se puso intenso con querer ir a probar las arepitas pues. Y si que quedò enamorado porque ese dia pidio dos mixtas y yo tambien le seguì el juego. La verdad nuestro verdadero tour turistico fue ir a comer a diferentes sitios. Acompañamos las arepas con papas a la francesa y jugos naturales, porque eso si se dio gusto probando todas nuestras frutas. A Cesare le parecio un sitio maluquito, pero decìa que la arepa era la reina de Colombia por lo deliciosas. En el mes y medio que duramos en Cartagena fuimos a este sitio unas tres veces y Ce no se aburrìa. Ademàs tiene buenos precios y cierra tarde!