Aunque dimos muchas vueltas por construcciones, de verdad que valió la pena encontrarlos... El servicio y calidez de su personal cambio todo, para la comida, recomendadísima su bandeja paisa si eres de buen comer con la Junior puedes quedar bien y pedir entradita como una morcillita, sin embargo, me llamó la atención que su majestad el Aguacate fuera el ausente en tan delicioso manjar. Sin duda nos vemos pronto para más chicharonsitos!!