Cada vez nos convencemos más que los restaurantes "de experiencia", no tienen en general una comida espectacular que exceda las expectativas. El lugar es muy bonito, los platos en los q te sirven muy originales y las recetas diferentes. Sin embargo los sabores distan mucho de ser contundentes. Ordenamos Pulpo Juana de entrada, un pulpo tostado, con poco sabor, la salsa muy sosa, y tres mini espárragos. Habíamos visto fotos previas de ese plato y redujeron la porción. Fuertes: lomo en reducción de porcini sobre hummus de garbanzo y zanahorias dulces. El plato es bueno, la carne en su punto, pero le falta sabor. A veces uno piensa q pedir sal adicional en un restaurante es casi q un insulto al chef, pero la verdad faltaba sal y sabor. Agradecemos la adicion de vegetales salteados. Costillas a la griolia... secas, sosas, con poca salsa. Los postres: pancakes de pistacho y canolis. Los pancakes regulares, los frutos rojos frescos pero es un postre muy grande con sabor poco contundente. Los canoli vienen tres, uno con ricotta y frutos rojos, otro con nutella y el otro con la misma salsa de pistacho de los pancakes. La masa crocante y deliciosa, el helado de pistacho bueno. El café bueno. Los cocteles se ven bien, no los probamos. En general un sitio ostentoso, dicen q bueno para brunch pero creemos que no para almorzar o cenar. Depronto volveremos por postre pero nada más.
Las reseñas que nos llevaron allí eran muy buenas, la verdad creo q es un buen restaurante sin ser espectacular. Probamos de entrada el pulpo a la gallega, buen término pero el sabor muy normal. De fuertes rabo de toro y las costillas de ternera. El rabo está muy bien de sabor, la carne se desprende de los huesos, delicioso. La costilla en buena cocción pero muy simple. Acompañamientos sin personalidad para el plato: papas francesas o una ensalada muy pero muy básica y pequeña (lechuga, tomate, aceitunas, balsámico y una vinagreta de verdad ácida). La sangría refrescante. El postre si delicioso, crema catalana con buen sabor y punto. Café rico. El servicio es impecable, el chef pendiente, pero creo q para ser un restaurante español le falta contundencia. Creo q volveremos a darle una probada a las paellas y pescados a ver que tal.
La verdad creo q lo mejor del restaurante es el ambiente y la puesta en escena. Los cocteles, regular. Mucha parafernalia para un colibrí q no sabía a tequila en ninguna parte. Pedimos varias cosas, dumplings, makkis, pulpo. Ganador el cangrejo. Rico pero no para morirse. Hay restaurantes donde se come mejor. El postre un volcán de chocolate que se les pasó de horneado, relleno con matcha (mmm no me convenció el sabor) y helado de pistacho muy simple, poco aromático. La verdad creo q repetiría por el ambiente en una ocasión muy especial, pero nada mas.
Es una buena alternativa para carnes. Los cortes Angus superan a los nacionales por sabor. Buen término de las carnes. Ordenamos media tapa cuadril, medio bife chorizo y una punta de anca, la punta nacional. La entrada de chunchullo (rehuso la palabra chinchulín) deliciosa, el chorizo riquísimo y la morcilla buena. La única recomendacion que les haría es la ensalada.... buenas carnes merecen una ensalada q le haga justicia, no una cama de lechuga con tres cascos de tomate y maiz. Buen servicio.
Santa Juana
Cada vez nos convencemos más que los restaurantes "de experiencia", no tienen en general una comida espectacular que exceda las expectativas. El lugar es muy bonito, los platos en los q te sirven muy originales y las recetas diferentes. Sin embargo los sabores distan mucho de ser contundentes. Ordenamos Pulpo Juana de entrada, un pulpo tostado, con poco sabor, la salsa muy sosa, y tres mini espárragos. Habíamos visto fotos previas de ese plato y redujeron la porción. Fuertes: lomo en reducción de porcini sobre hummus de garbanzo y zanahorias dulces. El plato es bueno, la carne en su punto, pero le falta sabor. A veces uno piensa q pedir sal adicional en un restaurante es casi q un insulto al chef, pero la verdad faltaba sal y sabor. Agradecemos la adicion de vegetales salteados. Costillas a la griolia... secas, sosas, con poca salsa. Los postres: pancakes de pistacho y canolis. Los pancakes regulares, los frutos rojos frescos pero es un postre muy grande con sabor poco contundente. Los canoli vienen tres, uno con ricotta y frutos rojos, otro con nutella y el otro con la misma salsa de pistacho de los pancakes. La masa crocante y deliciosa, el helado de pistacho bueno. El café bueno. Los cocteles se ven bien, no los probamos. En general un sitio ostentoso, dicen q bueno para brunch pero creemos que no para almorzar o cenar. Depronto volveremos por postre pero nada más.
Auténtiko
Las reseñas que nos llevaron allí eran muy buenas, la verdad creo q es un buen restaurante sin ser espectacular. Probamos de entrada el pulpo a la gallega, buen término pero el sabor muy normal. De fuertes rabo de toro y las costillas de ternera. El rabo está muy bien de sabor, la carne se desprende de los huesos, delicioso. La costilla en buena cocción pero muy simple. Acompañamientos sin personalidad para el plato: papas francesas o una ensalada muy pero muy básica y pequeña (lechuga, tomate, aceitunas, balsámico y una vinagreta de verdad ácida). La sangría refrescante. El postre si delicioso, crema catalana con buen sabor y punto. Café rico. El servicio es impecable, el chef pendiente, pero creo q para ser un restaurante español le falta contundencia. Creo q volveremos a darle una probada a las paellas y pescados a ver que tal.
Viva la Vida
La verdad creo q lo mejor del restaurante es el ambiente y la puesta en escena. Los cocteles, regular. Mucha parafernalia para un colibrí q no sabía a tequila en ninguna parte. Pedimos varias cosas, dumplings, makkis, pulpo. Ganador el cangrejo. Rico pero no para morirse. Hay restaurantes donde se come mejor. El postre un volcán de chocolate que se les pasó de horneado, relleno con matcha (mmm no me convenció el sabor) y helado de pistacho muy simple, poco aromático. La verdad creo q repetiría por el ambiente en una ocasión muy especial, pero nada mas.
El Viejo Bandoneon (Santafe)
Es una buena alternativa para carnes. Los cortes Angus superan a los nacionales por sabor. Buen término de las carnes. Ordenamos media tapa cuadril, medio bife chorizo y una punta de anca, la punta nacional. La entrada de chunchullo (rehuso la palabra chinchulín) deliciosa, el chorizo riquísimo y la morcilla buena. La única recomendacion que les haría es la ensalada.... buenas carnes merecen una ensalada q le haga justicia, no una cama de lechuga con tres cascos de tomate y maiz. Buen servicio.