Servicio espectacular. Valió la pena la espera que incluso es parte de la experiencia. Desde que entras notas la experiencia y el saber hacer. Todos los platos que pedimos muy buenos. Especialmente el ajiaco inmejorable y la bandeja paisa única. Recomendable 100%. Imprescindible si se pasa por Medellin a la hora del almuerzo.