Es un restaurante que está ubicado dentro de la cárcel de mujeres de San Diego, me pareció un bonito proyecto ya que con lo que se recauda contribuye a mejorar la calidad de vida de las internas. Parte de la asesoría del menú estuvo a cargo del chef Koldo Miranda ganador de una estrella Michelin.
Es un menú completo compuesto de: Entrada, plato fuerte, postre y jugo por $90.000, en mi caso pedí ceviche, encocado, limonada de coco y arroz de leche. Estuvo bien pero considero que el precio es exagerado.
Nos encantó, desde que llegamos se esmeraron en atendernos, todos fueron muy atentos. El sitio es hermoso, la decoración y el ambiente precioso.
La comida deliciosa, los tres pedimos platos diferentes y todos estaban exquisitos, lo acompañamos con una botella de vino. Personalmente me gusto mucho la pasta con camarones
Siempre que vamos a Cartagena visitamos este escondido y hermoso lugar.
La comida es deliciosa, lo mejor es la cazuela, acompañada de cerveza bien fría. Buena música, excelente servicio, siempre son muy atentos. Y lo mejor ver la puesta del sol en la terraza. Volvería siempre
El Interno
Es un restaurante que está ubicado dentro de la cárcel de mujeres de San Diego, me pareció un bonito proyecto ya que con lo que se recauda contribuye a mejorar la calidad de vida de las internas. Parte de la asesoría del menú estuvo a cargo del chef Koldo Miranda ganador de una estrella Michelin. Es un menú completo compuesto de: Entrada, plato fuerte, postre y jugo por $90.000, en mi caso pedí ceviche, encocado, limonada de coco y arroz de leche. Estuvo bien pero considero que el precio es exagerado.
La Girolata
Nos encantó, desde que llegamos se esmeraron en atendernos, todos fueron muy atentos. El sitio es hermoso, la decoración y el ambiente precioso. La comida deliciosa, los tres pedimos platos diferentes y todos estaban exquisitos, lo acompañamos con una botella de vino. Personalmente me gusto mucho la pasta con camarones
El Muelle
Siempre que vamos a Cartagena visitamos este escondido y hermoso lugar. La comida es deliciosa, lo mejor es la cazuela, acompañada de cerveza bien fría. Buena música, excelente servicio, siempre son muy atentos. Y lo mejor ver la puesta del sol en la terraza. Volvería siempre