Volviendo a salir luego de la llamada “pandemia” y que mejor ir a un clásico de Bogotá. Excelente comida, servicio, los meseros contentos de recibir comensales. Se pidieron diferentes platos, arroces, carnes y pastas. Todo en su punto, bien presentado, emplatado, como se debe esperar de un restaurante de esta tradición y calidad.