Decoración y ambiante original sobre cual reposa la sorpresa del sitio. La comida tipo Colombiana no es de gran creatividad y gran calidad. Punto positivo para la carne al trapo que estuvo rica y bien preparada. La sangría está afuera de precios razonables (18 000 pesos un vaso) y sin gran calidad. El lugar tiene parqueadero proprio lo que facilita su acceso. Los meseros atentos no son muy conocedores de los platos de la carta. Vale la pena pasar una vez por la originalidad del sitio.