Nuevamente paseando por Usaquén, como mejor plan de domingo, pues allí puedes: Perderse por las calles llena de vendedores para todos los gustos, y reencontrarnos en esa esquina donde se encuentra ubicada Santa Costilla, entrar y probar uno de sus deliciosos platos, para terminar viendo cine a pocas cuadras de allí, en cinema Paradiso. Sobre Santa Costilla, tengo que comentar inicialmente el Impresionante el amor que le coloca a su trabajo una niña de nombre Bibiana, quién después de un calido recibimiento, siempre está atenta de ubicarlo a uno en la mejor mesa, así como de estar pendiente de hacerlo sentir como un rey. Mil y mil felicitaciones por esa pasión de servicio que desbordas Bibiana. Sin duda el sabor de todo lo que ofrece este restaurante, solo es comparable con la atención y el esmero de sus empleados a los visitantes. Ya en otra ocasión había probado el plato insignia de la casa como su nombre lo indica: Santa Costilla, por eso esta vez opte por probar las pechugas Santa Costilla, buscando satisfacer un antojo de probar algo de tocineta. Muy, pero muy buena. Felicitaciones.