No me gustó. Ya había ido y decidí darle una segunda oportunidad, en la que confirme mi diagnóstico de la primera visita: es un mal restaurante. El servicio es malo, parece insuficiente el personal y no son atentos. La comida es desabrida: pedí un lomo pimienta, llegó una carne con una crema que no sabía a nada (ni a lomo, ni a crema ni a pimienta). A pagar ¡sorpresa! NO RECIBEN TARJETA DÉBITO.