Aunque no estaba en nuestro plan visitarlo, en gran ambiente que había nos hizo entrar y la verdad nos sorprendimos bailando y tomándonos unas cervezas bien frías entre gran cantidad de gente. Me divertí mucho junto a mi esposa. Punto a favor para el DJ que parece que conocía muy bien al público porque no había sitio libre donde bailar. Buena atención. Regresaría a probar la carta del menú, y si se puede volvería a “echar un pie”.