La comida no deslumbra! El ambiente es bonito pero la música es desesperante. Tienen un tipo de música rock rápido que desesperan al comensal, generando ganas de comer rápido para irse del sitio. La atención de los meseros es pésima. No conocen siquiera la carta, ni los tamaños de los platos. Definitivamente, no volvería.