La verdad después de andar metido en cafeterías de hospitales, este lugar en una opción muy buena. Lo desayunos con huevos y tosties son muy ricos, al almuerzo un sándwich o un combo de ensalada con sopa, rica opción. Los trabajadores son muy carismáticos, atentos y oportunos. El ambiente es relajante y ofrecen otras direcciones como libros para pintar.