Tradicional, pues está desde 1.934 lo cual es toda una hazaña. La comida bien, el servicio puede mejorar. Primero un buen refajo. Una entrada de chicharrones que estaban deliciosos. Pedimos Sobrebarriga buena sin ser excepcional, Lengua en salsa (bien) y Cocido boyacense que estaba bueno, unos frijoles con su acompañante (buenos) y un mondongo que estaba bastante bien. De sobremesa un postre de natas (famoso!) y un Matrimonio (Dulce de mora con Arequipe) de gran sabor! Unas aromáticas y café buenos. Sitio recomendado pero mejor hacer reserva porque se forma mucha cola.