La comida, la decoración y la atención son todo lo que uno espera de un lugar acogedor, en el cual comer es un placer. Es un restaurante con personalidad donde siempre es grato volver.

Falta cuidado a la hora de tener en cuenta el número de comensales. Eramos tres y la entrada de cortesía era para dos. Tuvimos que pedir una porción extra. Los tacos fueron ordenados por dos personas y decidieron servirlo a manera de plato compartido, lo pusieron a la mesa para una persona, por lo cual una de las personas pensó q el plato estaba demorado, hizo la observación al mesero y el indicó que el otro comensal los había consumido todos. Que situación tan desagradable. En ningun momento dijimos q lo sirvieran para compartir. Tuvimos que hacer una orden extra. Los tacos, con textura a comid vieja y fríos, por demás. A la hora de pedir la cuenta, nuevamente nos brindaron dos dulces de cortesía. Que descuido! Los detalles son los que hacen todo. Muy agria experiencia. El sitio desolado, falta variedad musical y el dj que aparecía en la página de Facebook para el sábado, no tocó. Que frustración, era para celebrar un cumpleños. Que mal 😞