Dentro de la oferta gastronómica del centro histórico, merece un lugar destacado este restaurante sin pretensiones. Ofrece un menú variado que cambia a lo largo de la semana. Sus precios so cómodos, máxime si has ido a la Vitrola o al Club de Pesca. La atención de los meseros es fresca y su ambiente cosmopolita. Altamente recomendable si buscas un lugar que no cuesta ni busca ser de la guia michelin y si quieres disfrutar de un atractivo ambiente cosmopolita.
Para los caribes que vivimos en Bogotá, el arroz chino es una de nuestras mayores añoranzas. No encuentras en la capital oferta gastronómica en este tipo de comida como la que se ofrece en Cartagena y Barranquilla. Dentro de esta destacada oferta, resalta com mayúsculas el Can Chow. Recomiendo especialmente los langostinos mariposa. Las platos, a menos que seas un comensal pantagruelico son para sos personas. Varias veces he visto a muchos comedores profesionales desfallecer ante el Rice Collins. Sin embargo, el local es un cuchitril con Gold Fishs en peceras turbias. Los meseros son insuficientes. Pero su sabor, hacen que siempre que voy a Cartagena, pase por el Can Chow, que está a media hora del centro y del aeropuero.
El Bistro
Dentro de la oferta gastronómica del centro histórico, merece un lugar destacado este restaurante sin pretensiones. Ofrece un menú variado que cambia a lo largo de la semana. Sus precios so cómodos, máxime si has ido a la Vitrola o al Club de Pesca. La atención de los meseros es fresca y su ambiente cosmopolita. Altamente recomendable si buscas un lugar que no cuesta ni busca ser de la guia michelin y si quieres disfrutar de un atractivo ambiente cosmopolita.
Can Chow
Para los caribes que vivimos en Bogotá, el arroz chino es una de nuestras mayores añoranzas. No encuentras en la capital oferta gastronómica en este tipo de comida como la que se ofrece en Cartagena y Barranquilla. Dentro de esta destacada oferta, resalta com mayúsculas el Can Chow. Recomiendo especialmente los langostinos mariposa. Las platos, a menos que seas un comensal pantagruelico son para sos personas. Varias veces he visto a muchos comedores profesionales desfallecer ante el Rice Collins. Sin embargo, el local es un cuchitril con Gold Fishs en peceras turbias. Los meseros son insuficientes. Pero su sabor, hacen que siempre que voy a Cartagena, pase por el Can Chow, que está a media hora del centro y del aeropuero.