Lamentablemente la experiencia en este restaurante es patética, el servicio de los más malos encontrados, con meseros y administradora vagos y descuidados. Los platos fuertes, se puede escoger desde el ajiaco hasta el puchero congelados, además de muchas ausencias de la carta. Es una muy mala imitación de la línea de Andres Carne de res... No vasta con tener buenas intensiones y dinero a la hora de abrir un restaurante, me pregunto para qué hacer una inversión de este tipo para una puesta en escena tan mala?????. Sirven en vasos rotos las bebidas, no cambian los cubiertos de las entradas, el mesero los descarga en la mesa usados a fin de no hacer el cambio. Carnes duras e insípidas y poco fieles las recetas. las entradas se rescatan un poco pero ante el resultado y el precio no vale la pena ni pasar por el frente, con razón en pleno medio día solo una mesa ocupada... la mía, qué engaño...