La llegada puede llegar a ser algo complicada y más cuando se va de noche, pero sin duda, llegar temprano tipo 5:30 y ver el atardecer desde el mirador, es un muy buen plan. Tienen happy hour de cocktails los sábados hasta las 8 pm, a veces un poco aguados. La comida es normal, no es del otro mundo, las entradas son ricas, los platos bien presentados. Recomiendo el pulpo al arrecife, delicioso.