Es una heladería gourmet caracterizada por unos sabores diferentes a los convencionales. Debo decir que por poco son los mejores helados de bogota. Extremadamente cremosos y con un sabor muy balanceado. La cantidad de azúcar es la adecuada y pude probar el helado de mascarpone que estaba exquisito. También venden chocolate, Brownie con helado y macarrones. El brownie con helado no estuvo tan bueno porque se encontraba muy congelado. Las paletas también son muy buenas y su relleno es de ataque. La atención es buena y rápida pero debo decir que el lugar no es muy cómodo y pequeño por lo que no hay espacio para disfrutar.