Fuera de las zonas destacadas de comida en la ciudad, este restaurante ofrece un muy buen producto, se nota la experiencia y técnica de los cocineros. La marisquería es un plato delicioso, sin duda alguna, el pulpo de entrada es tierno y suave. El ambiente es marinero y da impresión de estar en la playa, nada del otro mundo. El servicio es atento y amable. Los precios son altos; en calidad muy bien, en cantidad no tanto... Volver es una opción segura si se quiere comer buenos mariscos.