El ambiente del restaurante es muy chévere, la música, arquitectura y demás es excelente. que decepción la comida, es bastante normal tirando a mala para el precio, pedimos tacos de costilla, la carne ni siquiera venía cortada, tenía una cantidad desproporcionada de gordo y venía pegada al hueso ….. súper desagradable. nos sentaron en la banca de madera que da hacia la fachada, la madera está totalmente podrida, el pantalón nos quedó empapado por la temporada de lluvia y a el mesero no le importó la situación. no recomiendo el restaurante, tienen mucha competencia en la zona para decidir entrar a este restaurante, solo es fachada gastronómicamente hablando no tiene nada que ofrecer. NUNCA VOLVERÉ