Almorzar temprano los festivos tiene sus ventajas como no tener que esperar para una mesa, en aquellos sitios ricos como el caso de este restaurante en el centro comercial andino. Mi hija pidió un perro caliente, muy rico y de muy buen tamaño. Para comenzar un ceviche de pescado acompañado con el maíz cancha y trocitos de camote, y los platos fuertes en mi caso unas costillas de cerdo muy ricas y tiernas, “fall of the bone” en todo su esplendor y el de mi esposa un sándwich de posta negra espectacular, con aguacate, suero costeño y platanito maduro en su interior. De mis idas anteriores, tengo para recomendar sus pizzas, y cualquiera de los postres diseñados por Mark.