El restaurante se paralizo en el tiempo por ll menos los ultimos 15 años. Los meseros son sumamente atentos y las acomodaciones son agiles por el tamaño del restaurante. Hay servicio de parqueo y parqueaderos suficientes. La comida tradicional, sin sorpresas, las pausas en la opcion rodizio son mortales y las carnes se enfrian mientras llegan las guarniciones. Recomendada la barra de ensaladas. Ideal para ver partidos de futbol o visitar con toda la familia.