Fue mi última vez en este "restaurante". La atención muy deficiente. Aunque con cierta voluntad, la niña no tenía ni idea. El osobuco estaba espantoso. Cauchudo, soso y la presentación espantosa. La pasta muy blandita. No se podía ni enrollar. Y el olor de la calle y el ruido son espantosos. Se nota la contaminación de la calle. Cómo el restaurante es abierto...