Reservamos para un grupo de 11 personas y tardaron mas de 1 hora en servir los platos desde su pedido. Rescatables las entradas, el pulpo, pero los platos fuertes tuvieron quejas significativas en cuanto a su temperatura y presentación. En mi caso El bistec a la florentina estaba pasado de termino, pero habiendo ya esperado mas de 1 hora, no era pertinente hacer su devolución. El rissoto tampoco estaba en su punto. Los postres estuvieron bien, la milhoja, el flan y el tiramisú. No fue una buena experiencia. Muy diferente a las otras sedes donde hemos tenido mejores momentos.