El restaurante tiene un gran ambiente, los espacios están bien logrados y la música es agradable. La propuesta en cuanto a comida es mex nikkei y tienen una carta amplia e interesante. El guacamole de chicharrón fue un punto alto y en general toda la comida tiene gran sabor y buena presentación. Las propuestas vegetarianas son pocas por no decir nulas aunque muy amablemente se ofrecieron a poner las proteínas animales por separado. Los cócteles también recomendados.