Este ha sido uno de mis sitios favoritos en La Candelaria por más de 5 años luego de almorzar cuando estoy en esa zona, los espacios son acogedores y puedes elegir entre sillas de madera, poltronas o cojines en el suelo. Las bebidas con café son de muy buena preparación y cantidad, la comida "para picar" siempre es fresca y sus porciones son adecuadas al precio. Es un lugar para relajarse solo o acompañado, para degustar cocteles (que dicho sea de paso no le envidian nada a los preparados en sitios más costosos y de mayor nombre), para compartir una buena charla e incluso para cenar al son de buena música.