Caffé Latte

Estupendo el restaurante y el local. Muy bien ambientado. Se nota un esfuerzo importante por hacer sentir bien a los comensales. La comida muy buena. Destaco el sabor y la buena sazón de las carnes, especialmente el lomo. La hamburguesa y las pastas muy buenas. Los platos salen en un tiempo corto y muy calientes. Los precios son muy accequibles, comparados con otros restaurantes de su misma categoría en Bogotá. Una magnífica alternativa, dentro de la gran oferta gastronómica que hay en Bogotá. Me gustó y volveré con toda seguridad, pero ahora con más amigos para que disfruten este excelente sitio en el centro de la plaza principal de Usaquén.

Realmente no llegué a probar nada puesto que de las 3 cosas que pedimos regresó el mesero a decirnos que en el momento no tenían ninguna. Un sitio recién abierto siempre debería tener todo lo que ofrece la carta, que no es tan amplia, o por lo menos tener la delicadeza de decirle al comensal antes de que ordene que platos del menú no tiene. Por otro lado, el mesero no conocía el menu, ni en que consistían los platos; hace falta que los capaciten mejor.